¡CON EL FILTRO SBEV SE ACABA CON EL CONSUMO DE TEJIDO FILTRANTE!
Depurador automático por depresión con lona de filtración permanente. Capacidad de 700 a 950 l/min
Los filtros automáticos por depresión de la serie SBEV depuran los líquidos de lubricación y refrigeración asociando dimensiones reducidas y caudales muy elevados.
Ventajas
Funcionamiento
El líquido sucio, conducido mediante un distribuidor que impide las turbulencias, llega a la lona continua. Una turbina crea el vacío aspirando el aire de la cámara estanca bajo el lecho de filtración: la diferencia de presión entre esta cámara y el exterior permite al líquido atravesar la lona. Una vez en la cámara de vacío, el líquido se traslada al depósito de recogida mediante una bomba y se pone nuevamente en circulación. El efecto vacío aumenta el caudal, permite aumentar el espesor de panel de filtración y, aspirando el aire, obtener uno residuo seco y compacto. La acumulación de partículas sólidas obstruye el medio de filtración causando la elevación del líquido. Al alcanzar el nivel máximo establecido, el interruptor con boya inicia la limpieza de la lona enviando líquido a alta presión a contracorriente mediante boquillas; al mismo tiempo la lona avanza transportada por la cinta de malla metálica inferior y la lona limpia está nuevamente lista para la filtración. Los lodos, separados de la lona mediante un cepillo giratorio, se descargan en un recipiente de recogida de residuos. Gracias a avances breves de la cinta, se renueva solo una pequeña parte del medio de filtración, con la ventaja de incrementar la finura de la filtración, puesto que el líquido pasa siempre a través de la capa creada. La fase de limpieza de la lona no interrumpe el proceso de filtración, no es necesario un depósito adicional de tránsito.